La Decisión de Kevin De Bruyne
Después de la final de la FA Cup, Kevin De Bruyne reveló que probablemente no se uniría al Manchester City para el Mundial de Clubes, temiendo que una lesión comprometiera su futuro. Durante aproximadamente un mes, había sopesado la posibilidad de mudarse a Chicago o Nápoles, mientras las negociaciones avanzaban y retrocedían.
Otros clubes mostraron interés tras el anuncio de su salida de City; Juventus hizo una consulta informal, Inter Miami no pudo liberar espacio en su plantilla, y hubo breves conversaciones con Liverpool. Sin embargo, las propuestas más concretas presentaban desafíos muy distintos.
Rumores sobre Nápoles
De Bruyne organizó una fiesta de despedida pocos días después de la final de la copa, y sus compañeros de equipo tenían la impresión de que su próximo destino sería el Napoli. Días después, el presidente del club italiano, Aurelio De Laurentiis, reveló detalles de una videollamada con De Bruyne, afirmando que el jugador de 33 años ya había encontrado casa en la zona. No obstante, fuentes cercanas al mediocampista, que desean permanecer en el anonimato, insistieron en que esto no era cierto. Las declaraciones de De Laurentiis probablemente causaron más daño que beneficio, ya que llegaron antes de que se tomara una decisión final.
Hubo momentos en que De Bruyne se inclinó más hacia Chicago Fire, pero la influencia de figuras en Nápoles, incluido el delantero Romelu Lukaku, fue decisiva para que los campeones de la Serie A se llevaran la delantera. El deseo de unirse a un club con tanta historia y la oportunidad de seguir los pasos de Diego Maradona resultaron ser atractivos.
Factores Decisivos
Sin embargo, para el sumamente pragmático De Bruyne, consideraciones más tangibles marcaron la diferencia. El atractivo de jugar en la Champions League y bajo la dirección del entrenador Antonio Conte fueron factores decisivos. Fuentes cercanas a las negociaciones aseguran que el belga estaba parcialmente motivado por demostrar que City se equivocó al dejarlo ir.
La Anuncio de su Salida
El 4 de abril, De Bruyne anunció su salida de City a través de una declaración en su cuenta de Instagram. A pesar de haber reflexionado durante días y sentir que merecía un nuevo contrato debido a su potencial rol crucial en el club la próxima temporada, la falta de comunicación por parte de City dejó claro que no habría un nuevo acuerdo. La confirmación de esta noticia lo afectó profundamente.
Mientras su esposa y sus tres hijos se encontraban de vacaciones durante aproximadamente dos semanas, De Bruyne habló sobre el “alivio” de compartir su decisión con el mundo, después de encontrar dificultades para manejar sus emociones. Esa situación lo llevó a una serie de momentos elocuentes.
Reconocimiento y Apreciación
Ocho días después de su anuncio, inspiró a City a una victoria de 5-2 contra Crystal Palace en la Premier League, pero aún no había visto a su familia y mostraba su decepción hacia la decisión de City al hablar con los medios. Una semana después de recibir una ovación de pie en Goodison Park, se mostraba descontento tras el pitido final en la semifinal de la FA Cup.
El presidente Khaldoon Al Mubarak lo reconoció como el mejor jugador de la historia del club, presentando un mosaico en Kevin De Bruyne Crescent, una carretera que atraviesa el campo de entrenamiento. Un mural temporal fue pintado en el Northern Quarter de Manchester, y tras su última aparición en el Etihad, se anunció que se le erigiría una estatua fuera del estadio.
Futuro y Rumores de Otro Club
Inicialmente, De Bruyne y su familia esperaban quedase en el noroeste de Inglaterra, un área que consideraron hogar; sus tres hijos nacieron en Manchester. Aunque hubo breves conversaciones con Liverpool, los relatos sobre quién contactó a quién son contradictorios. Al final, Liverpool estaba listo para fichar a Florian Wirtz y tenía una reunión programada con Rayan Cherki, quien eventualmente se trasladó a City, lo que sugiere que De Bruyne no habría sido titular habitual.
Un posible rol secundario no habría atraído al belga y Liverpool tenía otros objetivos en mente.