El peso pesado que noqueó a Tyson fue derrotado por un ligero: Una advertencia para Jake Paul

Lecciones del Pasado en el Boxeo

La historia del boxeo está llena de lecciones para los luchadores que pasan por alto a oponentes más pequeños. Un ejemplo reciente que Jake Paul debería tener en cuenta antes de enfrentarse a Gervonta Davis proviene de 2018, cuando un peso pesado en declive fue humillado por un ex ligero.

El Encuentro entre Williams y McAllister

Esa noche en Aberdeen, Escocia, Danny Williams, el mismo hombre que noqueó de manera sensacional a Mike Tyson en 2004, fue sorprendido por Lee McAllister, un luchador que había competido recientemente en pesos tan bajos como 147 libras. McAllister, un ex campeón de la Commonwealth en 135 libras, subió más de sesenta libras para enfrentarse a Williams en la categoría de peso pesado, en lo que muchos vieron como un desajuste.

«A pesar de una diferencia de peso de cuatro piedras, McAllister derribó a Williams tres veces en la primera mitad de la pelea. Terminó el trabajo en el décimo asalto en el Beach Ballroom de Aberdeen», informó WBN en ese momento.

Paralelismos con el Combate de 2025

Avancemos a 2025, y las circunstancias tienen un inquietante parecido. Jake Paul, que compite en peso crucero, está listo para enfrentarse a Gervonta Davis, un campeón mundial de tres divisiones que comenzó su carrera en superpluma. En papel, la diferencia de tamaño y la estipulación de peso de 195 libras deberían hacer de Paul el gran favorito.

Pero, como descubrió Williams, ser el hombre más grande no garantiza la victoria cuando la velocidad, el tiempo y la habilidad están en tu contra. McAllister demostró que, a pesar de pesar cinco o seis divisiones por debajo de Williams durante la mayor parte de su carrera, un luchador más pequeño y más ágil con el plan de juego correcto puede derribar a un gigante.

La Confianza de Jake Paul

Paul no ha ocultado su confianza de cara a la pelea, desestimando a Davis como demasiado pequeño para amenazarlo. Sin embargo, Davis, conocido como uno de los pegadores más contundentes del deporte libra por libra, solo necesita una apertura para demostrar lo contrario.

La pelea entre Williams y McAllister es prueba de que las sorpresas a través de las divisiones de peso son posibles, particularmente cuando un luchador más viejo y pesado subestima a un oponente más rápido y explosivo. Jake Paul puede tener la juventud de su lado, pero si subestima el poder de Davis, el resultado podría resonar como la pesadilla de Williams en Aberdeen.