La Dificultad del Amor al Fútbol
Faith ama su club de fútbol y ha seguido sus altibajos desde que tiene memoria. Sin embargo, su amor ha sido puesto a prueba en las últimas temporadas debido a la negativa del club a suspender a un jugador acusado de agresión sexual por cuatro mujeres distintas. Arrestado y cuestionado por la policía en julio de 2022, el jugador ha estado bajo investigación y ahora depende de la Crown Prosecution Service (CPS) decidir si debe ser acusado.
Un Jugador Bajo la Lupa
A pesar de las acusaciones, el jugador ha seguido jugando y rindiendo bien para su equipo de Premier League, lo cual ha sido difícil para Faith de presenciar.
«Por primera vez en mi vida, vi un partido y ni siquiera quería que ganáramos»
explica. No podemos nombrar al jugador ni a su club por razones legales, y tampoco podemos identificar a las mujeres que han presentado quejas, ya que en el Reino Unido, las supuestas víctimas de abuso sexual tienen derecho a la anonimidad de por vida.
El Derecho a la Privacidad vs Interés Público
El Reino Unido mantiene una línea estricta respecto al derecho a la privacidad. Por ejemplo, cuando se preguntó a la Policía Metropolitana sobre el caso, solicitaron que se eliminara la ocupación del individuo de la línea de asunto del correo. No obstante, el interés público podría prevalecer si la CPS decidiera acusar al jugador. En tal caso, los medios podrían publicar su nombre, que muchos ya conocen.
La Moralidad de la Decisión del Club
A pesar de la falta de acusación, existe un deber de cuidado hacia el empleado, quien no es culpable hasta que se demuestre lo contrario. Esta es la razón por la que se argumenta que el club debería suspender al jugador durante la investigación. “El hecho de que el acusado en estos casos haya podido continuar su vida laboral es incorrecto y envía el mensaje equivocado”, dice Dino Nocivelli, un abogado especializado en reclamos de abuso sexual.
Disparidad en los Tratamientos de los Casos
A lo largo de los años, varios clubes han manejado casos de manera dispar. Mencionamos algunos ejemplos relevantes:
- Mason Greenwood del Manchester United fue suspendido rápidamente tras ser arrestado.
- Un jugador arrestado en 2021 bajo sospecha de delitos sexuales contra niños fue suspendido.
- En contraste, Yves Bissouma jugó mientras era investigado por la policía.
- Benjamin Mendy del Manchester City, aunque suspendido, también fue exonerado de todos los cargos.
Estos precedentes muestran la inconsistencia en cómo los clubes abordan estas situaciones, lo cual es problemático para la credibilidad del deporte.
Demandas de Cambio
Apoyados por diversas organizaciones, los aficionados y activistas están pidiendo a la Premier League y a la FA que adopten políticas claras sobre Conducta Inapropiada. Estas políticas podrían incluir medidas disciplinarias que van desde la suspensión sin sueldo hasta prohibiciones de por vida, así como el establecimiento de programas de capacitación y prevención sobre violencia de género.
“El fútbol tiene un problema serio con la violencia de género”
afirma Seyi Falodun-Liburd. Además, se destaca el papel de los aficionados: “Tienen el poder de exigir que sus clubes tomen en serio la violencia de género”.
Reflexiones Finales
Mientras el jugador y las presuntas víctimas esperan una decisión de la CPS, Faith y otros aficionados también buscan respuestas.
«Pero quiero que mi club sea parte de la solución, no del problema»
, concluye Faith. En un momento crítico para el fútbol masculino, es necesario que se aborden estas problemáticas de manera seria y responsable.