Cómo la cultura de los fanzines dio voz a los aficionados y transformó el fútbol inglés

Los Fanzines de Fútbol

Los Fanzines y Su Creatividad

Los títulos de los fanzines solían ser gloriosamente creativos y diversos; algunos rendían homenaje a los himnos de las gradas, mientras que otros hacían juegos de palabras ingeniosos. Durante su apogeo en los años 80, estos fanzines lograron vender más de un millón de copias al año, convirtiéndose rápidamente en un fenómeno. Los fanzines de fútbol emergieron en una década problemático en la que el deporte enfrentaba una crisis, pero contribuyeron a desencadenar un renacimiento.

Activismo y Voz de los Aficionados

No solo se trató del activismo de los aficionados, aunque fue significativo, ya que los fanzines se unieron a la lucha contra las tarjetas de identificación obligatorias, las fusiones de clubes y hasta propuestas para una nueva Superliga Europea, mucho antes de que la última versión surgiera en 2021. Al dar a los aficionados una voz tan postergada, los fanzines demostraron que quienes estaban en las gradas eran personas inteligentes y apasionadas, con algo que decir más allá del cliché del grito de guerra «¡Aquí Vamos!» que los tabloides usaban para generalizar a los aficionados como salvajes.

«Lo que hicieron los fanzines fue ofrecer una voz alternativa que representaba una variedad mucho más amplia de perspectivas sobre la cultura futbolística», comenta Kenn Taylor, miembro del equipo detrás de ‘Voice of the Fans’, una exposición en la Biblioteca Central de Leeds.

El Surgimiento de un Movimiento

Antes de estos fanzines, existieron versiones anteriores de revistas para aficionados. Foul, una parodia de revistas como Shoot! y Goal, fue producida por un grupo de estudiantes de Cambridge durante cuatro años desde 1972. Sin embargo, el verdadero movimiento nacional comenzó con la llegada de publicaciones orientadas a clubes, como Terrace Talk (York City), City Gent (Bradford City) y Fingerpost (West Bromwich Albion).

No había un solo tema que uniera a estos pioneros, solo el deseo de ofrecer un punto de vista alternativo sobre clubes cuya cobertura mediática se limitaba a la última página del periódico local. Pronto, ese primer goteo de fanzines se convirtió en una inundación, con When Saturday Comes, el abuelo de todos estos fanzines, llegando a las calles en 1986.

Conexiones entre el Fútbol y la Música

El vínculo entre el fútbol y la música ha sido siempre muy estrecho. A finales de los años 70, el punk dominó brevemente, y su ética DIY resonó entre los aficionados cansados de la prensa musical. Fanzines como Sniffin’ Glue y Anarchy in the UK se volvieron lectura obligada para los asistentes a conciertos.

El fútbol siguió ese camino en un momento en que el deporte tocaba fondo, marcado por tragedias como el incendio de Bradford City en 1985. Durante esta crisis, los fanzines ofrecieron un refugio para la creatividad y la resistencia.

«Los fanzines fueron un medio enormemente importante», opina Taylor.

El Legado de los Fanzines

Voice of the Valley, el fanzine de Charlton Athletic, ayudó a generar cambios significativos en su comunidad, abogando por el regreso a su hogar antiguo, The Valley. En las elecciones de 1990, el Valley Party logró un rendimiento sin precedentes, reclamando el 11% de los votos emitidos, lo que condujo eventualmente al regreso del fútbol a The Valley.

«Hoy, esa voz es más importante que nunca. En la exposición, tratamos de mostrar que la impresión sigue viva; encontramos al menos 60 fanzines que todavía se publican de manera regular», concluye Taylor.